10-9-2019.- La Federación Iberoamericana de Síndrome de Down (FIADOWN), de la que
forman parte una veintena entidades de trece países de Iberoamérica, vuelve a reclamar el
cumplimiento y la aplicación efectiva de todos los principios recogidos en la Convención de la
ONU sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad aprobada en 2007 como fórmula
para facilitar la inclusión en todos los países de las personas con Síndrome de Down en
particular, y discapacidad en general. FIADOWN muestra tu total apoyo y respaldo a la
Federación Brasileña de Asociaciones de Síndrome de Down, que denuncia una involución en
la política de educación inclusiva de Brasil y el incumplimiento de la Convención al proponer
el gobierno crear dos tipos de centros específicos para personas con discapacidad.
FIADOWN vuelve a reiterar su preocupación por la falta de voluntad en la mayoría de los
gobiernos iberoamericanos para acometer los cambios necesarios para hacer efectiva la
Convención de la ONU sobre los derechos de las Personas con Discapacidad, incluso en
aquellos países que ya la han ratificado. Al mismo tiempo, denuncia la regresión en materia
de inclusión que están poniendo en práctica algunos gobiernos. “Solo la inclusión efectiva y
en todos los ámbitos de la vida de las personas con discapacidad facilita construir sociedades
más justas y avanzadas”, reitera FIADOWN.
La Federación Brasileña de Asociaciones de Síndrome de Down (FBASD), entidad miembro de
FIADOWN, viene a manifestar su total rechazo a los cambios que propone el Ministerio de
Educación del país que, en la práctica, suponen un incumplimiento de la Política nacional de
Educación Especial y de la propia Convención de la ONU
La FBASD denuncia que el gobierno de Brasil quiere facilitar la reapertura de centros y aulas
de educación especial. “Entre las alteraciones que propone el ministerio consta que la escuela
regular no sea la única opción de los alumnos con discapacidad y sugiere la transferencia de
estos alumnos a otras unidades de enseñanza”. El gobierno de Brasil pretende crear dos
centros específicos, uno para estudiantes con discapacidad físico-motora y otro tipo para
estudiantes con discapacidad motora, intelectual y TEA (transtorno del espectro autista).
La entidad miembro de FIADOWN considera que la “transferencia de alumnos con
discapacidad a clases o escuelas especiales resulta una segregación y que vulnera el artículo
1º de la Ley 13.146 que estableció la Ley Brasileña de Inclusión de Personas con Discapacidad”
y que también viola la Convención de la ONU y su protocolo facultativo.
La FBASD está dispuesta a discutir, negociar y proponer cambios en la educación inclusiva,
“pero siempre para seguir avanzando, jamás para retroceder”, asegura.
FIADOWN apoya totalmente los postulados de la FBASD y solicita al gobierno de Brasil que
continúe trabajando para avanzar en la inclusión educativa, social y laboral de todas las
personas con discapacidad.